Entre razas. // Las Vegas // (rsv. Zoe)

Bajé del taxi. El taxista me intentó cobrar, pero a una mirada mía, arrancó el coche y se fue volado. Sonreí. Lo bueno de ser demonio. Estaba en un parque, en Las Vegas. Había salido de mi suite en el Hotel Venecia, y ahora, después de molestar a unos cuantos humanos y ganas 250.000 dólares en el casino, merecía un descanso. Mientras iba paseando, la gente se alejaba de mi. Normal. Todos humanos, además. Bueno, por ahora. Las Vegas estaba plagada de demonios. Por eso era una de mis ciudades favoritas. Me paré en medio del paseo y busqué un lugar solitario. Como esa arboleda, con un camino medio escondido por los arbustos. Y no parecía haber nadie. Dirigí mis pasos hacia allí, hasta llegar a un claro. Me tumbé allí, estirandome como un felino. Disfrutaba del día. Estube un buen rato allí, quien sabe cuanto. Un sonido me hizo incorporarme. Me giré, pero no había nadie. Busqué un poco, pero nada de nada. Sería algún animal. Pero capté un olor... Algo me hizo pensar que de animal, nada. Me encogí de hombros, como si no hubiera notado nada. Me volví a tumbar, sabiendo que había alguien más conmigo.

Oh Oh!. Habia un demonio en su territorio. SE suponia que todos los demas demonios de esa area sabian que zoe siempre esta entre aquellos arboles, esperando a algun humano a quien fastidiar. Pero nunca habia tenido que verselas con ningun otro demonio. Pero que importaba que raza era cuando lo que buscaba era pasar el rato. Salto de la rama del arbol de donde observaba al demonio.

Una figura oscura se interpuso entre mi y el árbol que estaba vigilando por el rabillo del ojo. Me incorporé rápidamente, de nuevo. Sonreí a mi acompañante.

-Hola guapa... -me callé enseguida. Yo recordaba a esa chica de algo.-¿Eres de Seattle?- abrí los ojos, sorprendido. La maldita universidad me perseguía a todas partes.

Eso era lo que le faltaba. Que apareciera alguien de Seatle y la reconociera. Pero ella no tenia que admitir nada.

- Soy de aqui y de alla. Nunca tengo un lugar fijo- le dijo sentandose en el suelo, cerca del arbol del que habia bajado- Al aprecer eres tu eres de Seatle. Dime,¿Que hace un demonio de Seatle en las Vegas?

Si, yo ya había visto a esa "chica".

-Pues descansar del Eissen... Ya sabes a que me refiero, ¿no es así?- pensé en la respuesta de ella. A mi tampoco me gustaba la Universidad, pero no lo negaba tanto... Algunos demonios se posicionaban en algunos lugares, como si fueran sus áreas... Siempre me había parecido algo animal...